Las ediciones anteriores fueron exitosas, la gente buscó actividades diferentes para ese momento como salir a ver las estrellas, e incluso edificios emblemáticos de todo el mundo apagaron sus luces. Este año se espera una participación aún mayor.
Sin embargo, para reflexionar antes de tomar una decisión, recogemos algunos debates que circulan en la red:
- Efectivamente, apagar la luz haría que baje el consumo pero mientras tanto… ¿nos quedamos a oscuras o usamos velas, pilas y baterías? Podríamos estar emitiendo más.
- Cuando se acaba la hora y todos volvemos a encender las luces al mismo tiempo… ¿no corremos el riesgo de sobrecargar la red y causar averías?
- Es solo una hora y no cuesta tanto esfuerzo… pero ¿estamos dispuestos a mejorar las prácticas durante todo el año?
- Millones de personas no encenderán las luces ese día, básicamente porque no tienen acceso a la electricidad.
No queremos desmerecer la iniciativa, que puede servir como llamada de atención desde la sociedad civil a los encargados de tomar decisiones. Lo que sí queremos evitar es que, una vez que acabe la Hora del Planeta, se retomen las costumbres que perjudican al ambiente pensando que ya se hizo suficiente, porque NO es suficiente. Es el momento de actuar y cambiar realmente nuestros hábitos de vida y consumo.
y tu, ¿apagarás la luz mañana?
Fuente: Acciónatura
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